viernes, 19 de diciembre de 2008

Soliloquio de una pena



Jardinero persistente,
doliente cultivador.
Rescató todo su amor
en un morado presente.

Delicado, complaciente,
brotó para oír su voz,
pero a ella no le gustó
y se marchó indiferente.

Púrpura que se estremece
porque no la conoció.
Sola de flores su vida,
fragante resignación.

Pedacito de un recuerdo
que su mano le brindó.
Candil que alumbra tristezas,
fiel mensajero de amor.

Niña sin flor que te fuiste
¿algún jardín te cubrió?
¿O tal vez en otras costas
te espera un vergel mejor?

Lejana niña ligera
alma gris, sin cosechar,
inmensidad que desdeña
la ofrenda de esa bondad.

Espera de hombre con flor,
luna que acuna la herida.
Mar que mece este poema,
puerto que la verá algún día.


Poesía: Cecilia Maurig

Ilustración: Vanessa Zorn


Modalidad de fusión de artistas : ¨El reino del revés¨
Poesía creada a partir de una ilustración


2 comentarios:

Alibruji dijo...

Belleza pura, como siempre!!!

anagg dijo...

Hermosísima poesía!!!
Y ni hablar de la ilustración de Vane!
Felicitaciones a las tres, incluida Coni.
besos